Dieta para la Colitis Ulcerosa

¿Por qué a mí? ¿Por qué ahora? ¿Qué he hecho yo para merecer esto?

La colitis ulcerosa

A todos nos ha pasado que de repente el mundo parece derrumbarse a nuestros pies y todo pierde sentido.

Te han diagnosticado colitis ulcerosa y como todas las desgracias, parece que llega en el peor momento,  y es que nunca hay uno bueno para que te diagnostiquen  una enfermedad, y no te voy a contar nada que no me haya pasado a mí mismo.

Como me ocurrió a mí en su día, tú ya habrás pasado por todas las fases de eso que los psicólogos llaman duelo: negación, enfado, negociación, dolor emocional y aceptación.

Si estás leyendo estas líneas es porque ya te encuentras en la última etapa, y eso es muy buena señal, pues sólo aceptando la realidad es cuando encontrarás soluciones y esta las tiene, pero algo tendrás que poner de tu parte.  Sígueme y te cuento.

¿Volvemos por un momento al pasado?

En la esta patología  que nos ocupa hay algo de predisposición genética, pero también interviene la epigenética, un palabro algo feo y pretencioso  que viene a decirte que la predisposición es eso, una predisposición, pero para que la colitis ulcerativa se exprese necesita en muchos casos de algo más, de algún detonante como el estrés, el sueño crónico, la falta de ejercicio, una mala alimentación o una combinación de estos factores que son, como ya podrás imaginar, algo así como una mecha que enciende la bomba que llevan escondida tus genes.

¿Ya vas intuyendo por qué te he invitado a echar la vista atrás?

Y es que llegados a ese punto, tal vez habrás deducido que si sigues haciendo lo mismo y fías todo a la medicación, no mejorará mucho más tu problema, así que tendrás que poner algo de tu parte para que la cosa mejore y que por ti no quede, y la buena noticia es que hay mucho por hacer, así que empecemos ¿me acompañas?

Sobre la influencia del estrés, el sueño y la falta de ejercicio sobre la inflamación no te mortificaré ahora. Te aviso de que influyen, y mucho, así que luego no digas que no te lo advertí cuando tras una época en la que no hayas manejado bien estos tres pilares, te sobrevenga un brote. Ahora ya lo sabes, no vengas lloriqueando que no lo sabías.

Vale, te compro el discurso de que no siempre está en nuestras manos el manejo del estrés, que hay muchos factores que nos pueden quitar el sueño, ahora hablaremos de como la dieta, además, puede influir, para bien, en tu sensación de relajación y favorecer el sueño. El cambio será increíble, tus sensaciones, también.

Y sobre el ejercicio, ni confinado en casa por una pandemia tienes escusa, que el cuerpo no necesita que corras una maratón todos los días, sólo que te muevas un poco. Siempre hay un momento para ir paseando a hacer la compra, subir a tu casa por las escaleras, o hacer algún ejercicio en el salón de casa, asistido por algún gurú del fitness en YouTube.

Y el otro factor sobre el vamos a ponernos ya manos a la obra es la dieta, y antes de avanzar en ella, te invito leer el post La dieta para la Enfermedad Inflamatoria Intestinal, con el que creo entenderás un poco el contexto en el que nos encontramos y comprenderás alguno de los motivos por los que tal vez se desencadenó tu inflamación crónica.

Finalidad de una dieta para la colitis ulcerosa

• Aliviar tus síntomas será la primera finalidad.
• Corregir tus deficiencias nutricionales.
• Mejorar tu calidad de vida.
• Y para los pacientes aún en fase de crecimiento, mejorar su correcto desarrollo.

¡Bravo! Muy bonito tu discurso, pensarás, parece una promesa electoral ¿verdad? pero aún no he respondido a tu pregunta

¿Y qué puedo comer con colitis ulcerosa a partir de ahora?

La respuesta, afortunadamente es sencilla, comida real, alimentos naturales para los que la evolución y tus genes sí están preparados y eso como podrás imaginar excluye todos aquellos que son procesados, llenos de colorantes, conservantes, potenciadores del sabor y otros tóxicos ante los que tu organismo se revela, con las consecuencias que tú ya conoces.

¿Que no te lo crees? Pues nada, sigue comiendo la misma basura con lo que has obtenido tan buenos resultados, pero no esperes ver ningún cambio que sea positivo.

Ya te he advertido que algo tenías que poner de tu parte, así que si prefieres lamentarte sentado en la taza del baño, tú decides, pero si lo que quieres es ver cambios en tu salud, lo primero será comer más sano ¿o de verdad crees que dejar la comida procesada te va a perjudicar? ¿No, verdad? Pues sigue leyendo que vamos a iniciar un cambio radical.

Es probable que te llame la atención que dejemos fuera nuestra dieta comida que hasta la fecha has considerado saludable, alimentos que,  aun siendo naturales, se incorporaron en la dieta humana hace relativamente poco tiempo, no el suficiente para que la humanidad se adaptara completamente a ellos, de tal forma que el organismo poco a poco se va resintiendo con su consumo con  consecuencias devastadoras para tu sistema digestivo.

La dieta que te voy a proponer tendrá dos ligeras variaciones, dependiendo de si tu colitis está en fase activa, es decir, tienes un brote, o está inactiva y asintomática, así que con tu permiso, empezamos por la primera de ellas.

Dieta para la colitis ulcerosa en fase de brote

En esta fase tu colon está hecho unos zorros: enrojecido, inflamado, con llagas y posiblemente sangrando así que tenemos que ser delicados con él, darle los alimentos y suplementos que más le gustan, y que este, en agradecimiento, rebaje su inflamación, desaparezcan las molestias, y te permita normalizar tu vida.

Te encuentras en una fase de inflamación, posiblemente acompañada de fiebre, dolores y continuas visitas al baño. Tus necesidades energéticas están aumentadas para hacer frente a este proceso pero, por otro lado, tu intestino no está para grandes banquetes, necesita descansar, así que te propongo  hacer sólo 3 comidas al día, respetando entre ellas los periodos de descanso de la digestión, sin picoteos, para que tu sistema digestivo se recupere. Seguramente en esta fase ni te apetezca, pero aun así he de avisarte: mejor si no hay visitas al frigorífico.

No obstante, por si eres de los que no puede evitarlo, te propondré algunas cosas para que tus tentempiés sean lo menos perjudiciales posible, pero sólo si eres un caso perdido, mejor deja descansar a tu intestino. Tú necesitas dormir, él también.

Suplementación en la colitis ulcerosa

Es posible que precises de algunos suplementos y vitaminas, especialmente en la fase de brote, motivado por las necesidades incrementadas y la dificultad para su absorción como consecuencia de la permeabilidad intestinal, la inflamación, las interacciones con la medicación y las pérdidas cuando hay cuadros diarreicos.

Aquí te detallaré alguno de los más importantes que te ayudarán a una más rápida recuperación del brote y a mantener tu enfermedad en remisión el mayor tiempo posible:

• Omega 3: El uso de suplementos y alimentos ricos en ácidos grasos poliinsaturados omega 3 ha demostrado su potencial para reducir la inflamación, el uso de medicamentos y mantener la fase de remisión. El omega 3 será tu principal aliado en esta guerra, recuérdalo siempre.
• L- Glutamina: Un estudio de la Universidad de León ha demostrado que la glutamina repara el daño intestinal, mejora las alteraciones producidas en las células y produce una inhibición en la expresión génica de mediadores inflamatorios. Esto consigue reducir la inflamación asociada a la enfermedad y una consecuente disminución del daño. Yo, ahí lo dejo, pero 10 gramos diarios le sentarán bien a tu intestino.
• Vitaminas: En especial ácido fólico, B6 y B12
• Oligoelementos: Hierro, cinc, potasio y selenio
• Calcio y vitamina D: Especialmente si estás tomando corticoesteroides en tu tratamiento contra la colitis ulcerosa. Si puedes, toma el sol, es la fuente más natural de vitamina D.
• Triglicéridos de cadena media (TCM): No te asustes con el nombre, tan sólo es aceite de coco, un lípido saludable que puede ayudarte si hay mala absorción de grasas y nutrientes liposolubles o si estás perdiendo mucho peso.
• Probióticos: Son suplementos y alimentos que contienen las bacterias beneficiosas que viven en tu intestino, mejoran tu salud general y han demostrado ser útiles en la CU, por lo que estaría recomendada tanto la suplementación como los alimentos que los contienen, por ejemplo: el chucrut fresco o el kéfir de agua.
• Prebióticos, entre los que destacaré el papel benéfico de:

1. Almidón resistente: En el colon encontraremos bacterias deseables e indeseables, y el almidón resistente colabora con las primeras para restaurar tu salud. Lo encontrarás en el plátano macho, o al consumir arroz o patatas del día anterior, sí, esas que dejaste en el frigorífico y que al dejar enfriar parte de su almidón se tornará resistente con todos los beneficios para tu aparato digestivo. Puedes también adquirirlo en forma de fécula de patata y consumir una cucharada mezclada en un vaso de agua, zumo de fruta, o añadida como espesante, por ejemplo, en una tortilla.
2. Butirato: De la fibra fermentada en el colon surge este ácido graso de cadena corta (AGCC) que ejerce un efecto antiinflamatorio, mejora la enfermedad de Crohn y tu colitis ulcerosa y también ayuda a prevenir el cáncer de colon. Existen suplementos comerciales y tienes el ajo o las nueces entre las fuentes naturales de este alimento para las paredes de tu pared intestinal.

¿Qué “alimentos” no debes tomar durante un brote de colitis ulcerosa?

Alimentos prohibidos o desaconsejados

• Productos procesados.
• Cualquier alimento que contenga de aditivos químicos (conservantes, colorantes, potenciadores del sabor, etcétera)
• Lácteos: ni leche ni sus derivados, por su asociarse su consumo con el aumento de la inflamación, las flatulencias y los procesos diarreicos.
• Productos ricos en fibra insoluble, especialmente si padeces de estenosis (estrechamiento del intestino).
  • Evita por tanto alimentos como los arroces integrales, los vegetales muy leñosos como alcachofas y espárragos. Evita también las frutas con piel.
• Todos los cereales y pseudocereales (trigo, maíz, arroz, trigo sarraceno, quinoa, avena, etcétera.) y especialmente los que contienen gluten, así que huye tanto del pan, las galletas y la pasta como de cualquier otro producto elaborado con harina de cereales, tanto si estás en brote, como si no lo estás.
• Legumbres: Eso quiere decir que ni garbanzos, ni lentejas, ni habas, frijoles o cualquier otra legumbre que se te esté ocurriendo comer. Si ya sabes lo que hacen en una persona sana, imagina lo que pueden provocar en una fase de brote.
• Verduras y hortalizas sí puedes consumirlas, pero evita hacerlo en crudo, siempre cocinadas y bien troceadas, chafadas, en puré y si puedes, cuélalas, para reducir el número de residuos.
• Solanáceas: Mejor si durante el brote evitas alimentos ricos en solanina, un tóxico natural que se encuentra en patatas, tomates, pimientos o berenjenas.
• Aceites vegetales (aceite de soja, lino, colza …)
• Frutos secos, semillas y especias derivadas de semillas (comino, mostaza, nuez moscada, etcétera )
• Nada de alcohol.
• Bebidas con gas: Nada de bebidas o zumos artificiales y mucho menos con gas.
• Evita el café y bebidas con cafeína, que actúa como laxante.
• Chocolates y cacao
• Evita los azúcares, pero también los edulcorantes, especialmente el sorbitol, xilitol y todos los polialcoholes acabados en “ol”, por ser laxantes.

¿Qué alimentos puedo tomar durante el brote?

Los alimentos permitidos durante el brote de colitis ulcerosa son:

• Carnes, aves, vísceras, pescado y marisco
• Frutas y verduras, excepto las solanáceas
• Grasas saludables:
  • Aceite de oliva virgen
  • Aceite de coco
  • Aguacate
  • Grasa de animales de pasto
• Alimentos probióticos (kombucha, kéfir de agua o de coco, chucrut …)
• Infusiones de hierbas, vinagres sin azúcares ni pasteurizados
• Miel cruda en muy pequeñas cantidades y de forma ocasional
• El jengibre y la cúrcuma, y también hierbas frescas como albahaca, tomillo, cilantro, perejil, menta, etcétera, que se recomiendan por su capacidad, especialmente las dos primeras, para reducir la inflamación.

Dieta para la colitis ulcerosa inactiva o en fase de remisión

Aquí debieras de echar mano del sentido común y  seguir la misma dieta que en fase de brote, ya que si esta dieta te ayudó, nada te impide continuarla para mantenerte bien, pero entiendo que tal vez la encuentres algo restrictiva, así que si vas a permitirte algún desliz, recuerda que en ningún caso has de probar estos grupos de alimentos que te detallo, o te verás pronto volviendo a la dieta para el brote:

Alimentos “prohibidos” en la fase de remisión:

• Productos procesados y ultraprocesados.
• Cereales, y especialmente los integrales o con gluten: puedes hacer excepciones con el arroz y el maíz, que son menos problemáticos, pero no abuses.
• Leche y derivados con o sin lactosa: ni olerlos
• Legumbres: Tampoco debes, pero si vas a pecar evita las más problemáticas, conocidas según la región como judías, alubias habichuelas, frijoles o porotos.
• Solanáceas: sin abusar, tomate y patatas, evitando las fritas y optando por formas más amables para tu intestino como el hervido, asado, al horno, etcétera.

EJEMPLO DE PLAN DIETÉTICO PARA LAS ETAPAS DE BROTE Y REMISIÓN 

DIETA SEMANAL PARA LA COLITIS ULCEROSA EN BROTE

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DIETA SEMANAL PARA LA COLITIS ULCEROSA EN REMISIÓN

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